Un nuevo título perteneciente al mundo de las carreras ha llegado bajo el nombre de uno de los más grandes corredores de rally como es Sebastien Loeb. ¿Qué nos deja esta entrega? Una sensación agridulce porque quizá, esperaba más de Milestone (desarrolladora) quien posee historial en esto. La nostalgia Antes de adentrarme por completo en este título, me ganó la nostalgia y recordé como, de a poco, el rally fue ganando escenario entre los juegos de conducción más solicitados. Personalmente, tengo como punto de partida a Rally Championship (1996) (video) un título de DOS (¡ya venía en CD!) que lo resumo como un JUEGAZO. Cuantas horas y cuantos bellos recuerdos bajo la lluvia conduciendo un Subaru Impreza y un Renault Megane (foto). Otro tan recordado, y más por quienes en nuestra infancia fuimos asiduos de los “fichines”, es el gran Sega Rally (video) un verdadero ícono del tema. Rally Championship 1996 – Fuente: old-games.ru Ya saltando a la primer consola de Sony, encontramos el inicio de la saga desarrollada por Codemasters, Colin McRae Rally (otro destacadísimo conductor) que después tantas entregas sufrió una sustancial modificación en su nombre para abanderarse “DiRT”. Bajo este nombre, tuvo dos ediciones: DiRT 3 y una peculiar DiRT Showdown. Ya para principios del 2015 llegó DiRT Rally de modo Early Access (tiene dedicado en nuestro sitio unas primeras impresiones). Con esta pequeña alteración de nombre, trajo la idea de dejar un poco de lado la jugabilidad arcade de sus predecesores para centrarse en la simulación, algo que logró de muy buena forma. El primer título de la saga Colin McRae. Durante los años de Colin McRae/DiRT también estuvo presente franquicia WRC (World Rally Championship) desarrollada al principio por Evolution Studios (conocidos por MotorStorm y Drive Club) y durante los últimos cinco años a cargo de la empresa italiana Milestone. El último lanzamiento llamado WRC 5 dejó mucho que desear, marcando una gran diferencia entre lo que ofrece DiRT y WRC. Luego de esta pseudo introducción personal y cronológica, estamos en condiciones de hablar de Sebastien Loeb Rally Evo. Bienvenido Loeb al mundo videojueguil Este título disponible en PC, Playstation 4 y XBOX One; al principio, parece ser una alternativa aceptable entre los candidatos actuales del género de conducción. Pero… ¿Por qué?¿Qué tiene Sebastien Loeb Rally Evo de interesante? Si bien el juego cumple con un catálogo variado de vehículos y circuitos, el punto más fuerte es modo Loeb Experience que nos permite desde nuestro sillón o escritorio “revivir» la trayectoria del piloto galo mediante sus hitos más importantes. Previo a algunas de estas competiciones, aparecen videos introductorios donde Sebastien cuenta su experiencia en cada una de estas etapas. Automáticamente se me ocurrió «comparar» esto como si fuera un modo de FIFA o PES que nos permita recrear la carrera del Diego y poder esel Mundial México 86 siendo el Diego… ¡Me vuelvo loco! Menú simple y atractivo similar a los menúes de DiRT. En este caso, vemos el modo Loeb Experience. Como comenté al principio, la mayoría de los juegos de conducción para captar al jugador hacen énfasis es en su catálogo de vehículos, modos de juego y circuitos. En el primer punto mencionado es donde el juego muestra un gran trabajo teniendo más de 50 vehículos reales. En el segundo punto también cumple teniendo varios modos de competición (sobre todo el modo «carrera») aunque ya llegando al tercero, si bien hay circuitos, estos no están licenciados y por ende, no son fieles a lo que al mundo de los mortales respecta. Buena idea pero mal ejecutada Hablando un poco de la jugabilidad y el apartado gráfico, si lo comparamos con lo último lanzado por Milestone, el WRC 5, contrasta de forma positiva aunque si queremos realmente ser objetivos, no podemos tomarlo como un punto de comparación válido ya que estamos ante un juego de última generación de consolas y no se ve que realmente se aproveche de esto. Buen aspecto de la cámara interna. En primer lugar, la jugabilidad esta en el limbo. No es claro diferenciar si busca ser un verdadero simulador o tener un simple estilo arcade. La física, en ciertos momentos, se vuelve incomprensible. A veces, el vehículo pierde sintonía con el ambiente: el modo de impacto random con objetos de la pista que no son claros y los vuelos cinematográficos que hacen que termine por restar puntos. Otra cosita que para mi es vital en los títulos del género, es el multiplayer local. Lamentablemente sólo posee este modo de forma online. Se que estamos en un mundo 2.0, pero la vieja escuela siempre esta presente en el corazón para unas carreritas cara a cara con un amigo. Para culminar y ser totalmente franco, el apartado gráfico es pobre. Quizá si SLRE hubiera sido sólido en su jugabilidad no sería tan quisquilloso en este aspecto. Durante ciertos momentos sufrimos de una mala optimización gráfica (por lo menos en PC) donde encontramos bastantes caídas de frames. Tanto en PS4 como en XBOX One, el juego se encuentra limitado a 30 cuadros por segundo y si mechamos esto con lo que comenté al principio que no muestra aprovechamiento del potencial de la actual generación de consolas. Una verdadera lástima. La búsqueda de la inmersión del jugador es bastante floja, un ejemplo rápido es la siguiente captura en la que vemos como se nos queda totalmente la pantalla en blanco debido a nuestra brusca aceleración sobre un terreno nevado. ¿Un poco excesivo, no? ¿Se llenó de humo la pantalla? Quedate tranquilo que no fue Caruso, simplemente es nieve. Conclusión Estamos ante el primer título de Milestone exclusivo para la nueva generación de consolas y PC, por el cual esperaba a nivel general una diferencia abismal con el último WRC 5 y no he tenido dicho placer. Se equivoca en muchas cosas, principalmente en no ofrecer una jugabilidad decente o gráficos acordes al espacio temporal en el fue lanzado. Esperemos que haya una segunda y buena oportunidad para otro título dedicado al gran Loeb.
